La aprobación de la reforma laboral genera una serie de nuevas obligaciones para los patrones, lo que complican su aplicación, especialmente para las pequeñas y medianas empresas (pymes). 

El Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP) que preside el Florentino Bautista Hernández, señaló que resulta trascendental su aprobación en el camino de la ratificación del T-MEC.   

Una de las modificaciones más importantes es la desaparición de las Juntas de Conciliación y Arbitraje, que ahora se integran al poder judicial, convirtiéndose en tribunales, con las implicaciones que esto conlleva.

Con la nueva reforma se suman nuevas obligaciones para los patrones, lo que complica su camino hacia el cabal cumplimiento de sus deberes en materia laboral y  podría incentivar la generación de empleos informales o la generación de esquemas agresivos, en su caso. 

Destacó que esta reforma establece penas corporales y multas representativas y específicas para aquellos patrones que declaren para efectos de seguridad social salarios inferiores a los realmente percibidos. 

El IMCP especificó que se otorga un plazo extenso para la transición de aproximadamente 4 años, tiempo en el que, de acuerdo a la fecha de entrada en vigor y del origen de los asuntos, ambos sistemas funcionarán a la par. 

Los principales avances se encuentran en la protección a las trabajadoras embarazadas, pretendiendo garantizar su acceso a la seguridad social durante un proceso de controversia legal. 

También la aceptación de los CDFI como comprobantes fehacientes, en caso de conflicto, la posibilidad para los patrones de probar en juicio el despido justificado, aun cuando no se haya dado aviso personal al trabajador o a la autoridad competente. ?

La validez de los acuerdos de conclusión, siempre que éstos no representen una renuncia a los derechos laborales. 

Por otro lado, el tema sindical; el reforzamiento y la clarificación de los procesos para otorgar validez a los acuerdos sindicales, la enfatización del derecho al sindicalismo, la convivencia de varios sindicatos y varios contratos laborales para un mismo patrón. 

Consideramos que, estas reformas, claramente abonan en el proceso de aprobación del T-MEC; lo que nos beneficia en términos económicos, por lo que se aplaude. 

El IMCP advirtió que se deberá vigilar los posibles efectos de una merma en la competitividad como país, desde el punto de vista de mano de obra. 

Asimismo, apuntó que se deben establecer reglas claras y procesos de protección para los pequeños empresarios, quienes aportan la mayoría de las fuentes de empleo al país y que, desafortunadamente, quedan vulnerables en algunos aspectos, sobre todo en los relacionados a temas sindicales. 

Finalmente, indicó que en materia laboral y de seguridad social, todavía hay mucho por hacer: incentivos fiscales, la deducción de la nómina en su totalidad, y una reforma integral al sistema de pensiones, tarea urgente y prioritaria.