México podría pasar por una época de menor crecimiento económico, pero se ve lejana la posibilidad de entrar en una recesión con la llegada de Donald Trump, coincidieron Miguel Messmacher, subsecretario de Hacienda, y Fausto Hernández, investigador del CIDE, en una mesa de análisis de REFORMA.

“Es prematuro hablar de recesión incluso en caso de que el TLC se cancele (…) Lo veo poco probable”, sostuvo Hernández.

En tanto, Juan Pablo Castañón, presidente del CCE, indicó que hay datos macroeconómicos que favorecen al País, pero hay que hacer una modernización.

“El escenario es de posible crecimiento más moderado”, complementó Messmacher.

A Hernández Trillo llamó la atención al hecho de que la depreciación del peso observada desde 2010 y hasta la fecha no es totalmente atribuida a Trump.

Recordó que el tipo de cambio pasó de 13.8 pesos en octubre de 2010 a 18.70 antes de Trump.

“El efecto Trump no ha sido tan grande como el hecho de que los mercados captaron (en ese periodo) que las finanzas públicas no son tan sanas y que la deuda creció”, aclaró.

Para el investigador, México tiene que repensar su política de comercio exterior y la efectividad de sus alianzas y tratados comerciales.

“A México le corresponde un plan de largo plazo, debe sentarse a repensar su comercio exterior, repensar tener nuevas alianzas comerciales y también fortalecer otros aspectos, como el mercado interno”, dijo Hernández Trillo.

Refirió que hay herramientas con las que México cuenta para hacer un plan, entre ellas la posición geopolítica.

Frente a la renegociación del TLC, Messmacher se mostró confiado en que se basará en cambios en los que México ya está de acuerdo desde hace tiempo.

Mencionó que ellos podrían ser: poner reglas de origen más estrictas, mayor la protección intelectual y evitar cualquier manipulación cambiaria.

“Con todo, estamos de acuerdo en que se revise”.

Cuestionado por qué hay mayor dependencia comercial hoy con Estados Unidos, Messmacher defendió que México es uno de los países que tiene la agenda más ambiciosa de comercio exterior.

Pero el investigador del CIDE señaló que, aunque México es el País con más tratados de libre comercio en el mundo, quizás ese ya no sea el instrumento más adecuado para el crecimiento.

Los participantes coincidieron que también EU perdería al salirse del TLCAN.

Hernández Trillo anticipó que según las últimas cifras divulgadas, del comercio con México dependen 3 millones 600 mil empleos y en estados como Texas con fuertes exportaciones, 40 por ciento del empleo depende del comercio.

“Vale la pena enfatizar que hay un cambio de discurso a lo largo de este proceso. Primero, el candidato Trump al inicio de su campaña, habla de manera muy firme de cancelar el TLC, después va evolucionando la postura hasta el último documento donde reconoce que su enfoque inicial no será cancelarlo, sino buscar la renegociación”, afirmó Messmacher.

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