En abril, los especialistas del sector privado consultados por el Banco de México (Banxico) elevaron ligeramente, por primera vez en al menos un año, su expectativa de crecimiento para el 2016.

Los encuestados esperan un crecimiento de 2.41%, desde 2.40% previsto en la encuesta de marzo.

Por ahora, el pronóstico del mercado se mantiene alineado con las proyecciones que tiene para México el Fondo Monetario Internacional (FMI) y se ubican por debajo de la media del rango esperado por Banco de México para la expansión de este año, que va de 2 a 3 por ciento.

Pese a los resultados de la encuesta, la percepción de sostenibilidad no pudo extenderse para las expectativas del año entrante, que sufrieron un nuevo recorte, el cuarto consecutivo en lo que va del año, para dejarlas en un promedio de 2.86% desde 2.91 por ciento.

Esto, como resultado de la persistente debilidad que observan el mercado externo y la economía mundial; la inestabilidad financiera internacional, los problemas de inseguridad pública y el precio de exportación del petróleo.

Las expectativas para la inflación y el tipo de cambio también mejoraron.

Los especialistas consideran que, al cierre del año, el tipo de cambio se ubique en 17.61 pesos por dólar desde 17.66 pesos que preveían en marzo.

Asimismo, los economistas prevén que la inflación sea de 3.19%, desde 3.30% de la encuesta previa.

En cuanto a la tasa de fondeo interbancario, para el segundo trimestre de 2016, los especialistass esperan que sea igual a la tasa objetivo actual de 3.75 por ciento.

Sobre el pronóstico de crecimiento de Estados Unidos, los analistas revisaron a la baja sus expectativas para el 2016 con respecto a la encuesta anterior, de 2.15 a 2.04%, y para el 2017 de 2.31 a 2.27 por ciento.

Mesuran pesimismo

En el apartado sobre percepción del clima de negocios, se observa una reducción en la proporción de analistas que considera que empeorará en los próximos seis meses.

En abril, 3% de los encuestados consideró que será peor, contra 11% que tenía este sentimiento el mes previo. Apenas subió a 26% la proporción de especialistas que cree que mejorará, desde 23% de marzo, y ahora, prevalece la percepción de que se mantendrá igual en 71% de los consultados.

También subió la proporción de expertos que observa que la economía está mejor que hace un año, al pasar de 44%, en marzo, a 49%, en abril.

Resultado de estas percepciones, 35% de los encuestados considera que es un buen momento para realizar inversiones, 56% no está seguro y 9% dice que es mal momento.

En orden de importancia, entre los principales factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico en los próximos meses mencionan: la debilidad del mercado externo y la economía mundial; la inestabilidad financiera internacional; problemas de inseguridad pública; el precio de exportación del petróleo y la plataforma de producción petrolera .

Lento panorama a 10 años

Las perspectivas de crecimiento para la próxima década, en el último año, se han venido recortando. En abril del año pasado, preveían, en promedio, una expansión de 3.78%; ahora estiman que sea de 3.20%, es decir, 50 puntos base menos.

Así, los analistas parecen concordar con el FMI en que la economía mexicana no tendrá la capacidad para crecer más allá de 3.20%, en la siguiente década.

Apenas la semana pasada, en su visita a México, el director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo, Alejandro Werner, explicó que el organismo pospuso cinco años la expectativa de una aceleración del crecimiento de México, a un ritmo de 3% anual, resultado del bajo precio del petróleo y su impacto en las decisiones de inversionistas en el sector.

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