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Milenio, Negocios

Alberto Verdusco y Óscar Granados

El mercado interno permanecerá relativamente débil durante el presente año y no logrará impactar favorablemente sobre la actividad productiva en el futuro si no se resuelven los problemas estructurales de los que adolece ese motor de la economía, coincidieron expertos.

El bajo mercado crediticio, el estancamiento en el ofrecimiento de recursos para vivienda, una tasa de desempleo elevada, la inflación relativamente alta y menores percepciones salariales han impedido un mejor desempeño en la recuperación económica de México.

En su reporte sobre perspectivas económicas globales 2010, el Banco de México reconoció que aunque la economía mexicana crecerá a una mayor tasa este año, la recuperación en el mercado interno registra debilidad, pues el poder adquisitivo de las personas se ha mermado ante mayores tasas de impuestos, incrementos en las tarifas de bienes administrados y débiles remesas.

“En el país tenemos una recuperación heterogénea, mientras hay un sector exportador en recuperación, la economía interna no ha podido empezar a crecer con la fuerza necesaria”, aseguró el presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas, Jonathan Heath.

Reconoció que mientras el mercado crediticio del país (de casi 14 por ciento como proporción del producto interno bruto) no incremente su monto de apoyo, el país estará condenado a registrar tasas de crecimiento pobres en la próxima década, aun cuando se llegaran a aprobar las reformas estructurales.

En ese sentido, una fuente del Banco de México, que pidió omitir su nombre, afirmó que una situación de incertidumbre obliga a los bancos ser cautelosos en el otorgamiento de crédito; “sabemos que hay una relación positiva entre crecimiento económico y disponibilidad de crédito, pero también hay que pensar que hay otras reformas estructurales en el país que deberían coadyuvar a tener o alcanzar mejores rendimientos y sostenidos a lo largo del tiempo”, dijo.

Aseguró que aunque el crédito ayuda, no es la única vía para que el país avance; sugirió verlo en perspectiva, pues “en los años previos a la crisis de 1995 los niveles andaban por arriba de 40 por ciento, pero este tipo de crecimientos acelerados pueden causar problemas muy serios de incumplimiento”.

Afirmó que no necesariamente ofrecer mayor crédito de manera acelerada es lo más recomendable.

En ese sentido, el economista en jefe del Banco Mundial, Augusto de la Torre, dijo que el sistema financiero es para la economía lo que el cerebro para el cuerpo humano, por lo cual dijo que su desarrollo apoya un mayor crecimiento.

Comentó que en el caso de México las grandes firmas tienen acceso a todos los servicios financieros y donde hay mucho campo para apoyar es en las pequeñas y medianas empresas a las que se debe ofrecer servicios prudentes pero de manera más cuantiosa.

Debilidades

De acuerdo con el estudio de perspectivas económicas de México 2010-2011 del Tecnológico de Monterrey, el proceso de recuperación se basa en el sector externo dependiente de EU el cual se encuentra sin encadenamientos con el mercado interno y a su vez no genera un impacto marginal sobre la economía familiar.

Asimismo, aseguró que la recuperación económica se ha dado sin inversión y en un estado crítico en el mercado laboral.

“Parece claro que el llamado de algunos empresarios a generar empleos de calidad es totalmente oportuno, ya que sólo mediante un incremento en las remuneraciones y prestaciones se podrá alcanzar el desarrollo del mercado interno”, destacó el informe.