Hoy es más práctico realizar la que parece la más tortuosa de las obligaciones: la declaración anual. Ello con la ayuda de internet, sin embargo, también conlleva peligros como los fraudes.

De acuerdo con Norton los fraudes en línea aumentan durante marzo y abril, cuando se realizan las declaraciones de personas morales y físicas, así que tienes que estar muy alerta.

Mucho ojo
Así, te puedes encontrar con un correo falso con el mensaje “Felicidades por declarar tus impuestos”. Este tipo de email no están verificados, te confirma la recepción de la documentación, y al mismo tiempo solicita al contribuyente la comprobación de algunos datos para un supuesto reembolso.

Todo ello sólo tiene el único objetivo de recibir información financiera para “recaudar” la devolución que podría haber obtenido originalmente el declarante.

La firma especialista en seguridad, explica que además este existen otros tipos de ataques usuales como el phishing, las páginas falsas que parecen confiables; los correos de reclamaciones tributarias que se caracterizan por inyectar malware y mensajes spam, donde supuestamente ofrecen ayuda a los contribuyentes para completar su declaración aunal con el fin de obtener información personal y financiera de los contribuyentes.

Toma en cuenta
Las recomendaciones de los expertos de Norton son:

1. Usa un software de seguridad de internet en todos tus dispositivos, para nadie es un secreto que los criminales son hábiles y pueden usar una combinación de los dispositivos en tu hogar.

2. No optar por programas de seguridad gratuitos, es más sencillo que extraigan información personal de tu computadora.

3. No realices el proceso de declaración anual, transacciones bancarias o de comercio electrónico usando Wi-Fi, conéctate mediante cable Ethernet.

4. No dar clic en links de correos para acceder a datos bancarios o fiscales, teclear directamente la dirección en tu navegador y asegurarse de que el mensaje es legítimo.

5. Para crear un código de seguridad inteligente usa una combinación de letras, números y otros caracteres.

6. Asegúrate de usar la versión necesaria del sistema operativo para realizar tu declaración.

7. Busca el pequeño ícono de un candado en tu explorador. Asegúrate de que el URL empiece con “https”, no sólo con “http”.

8. Al terminar el procedimiento, borra todo en el dispositivo utilizado y respalda la información en un disco duro externo.

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