Premio Nobel de Economía y Experto Anticorrupción abandonan Panamá Papers
Por: Daniel Ortíz de Montellano, CAMS, CFCS
Integrante de la Comisión de PLD/FT y Anticorrupción del IMCP
Texto Original: La Jornada. (06 de Agosto de 2016). Premio Nobel y experto anticorrupción abandonan comité de ‘Papeles de Panamá’. Recuperado el 08 de Agosto de 2016, de La Jornada: Mundo:http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2016/08/06/premio-nobel-y-experto-anticorrupcion-abandonan-comite-de-papeles-de-panama
Desde que el ICIJ (Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, por sus siglas en inglés) diera a conocer hace algunos meses lo que podríamos llamar como la filtración de datos más grande en los últimos años, también mal llamada “Panamá Papers”, se desató una gran controversia a nivel global.
Si bien es cierto que la base de datos publicada por el ICIJ exponía a grandes figuras públicas mundiales utilizando esquemas complejos de sociedades offshore, también lo es el que el uso de este tipo de entidades no necesariamente es ilegal, siempre y cuando se le den los usos adecuados.
“Panamá Papers”, o los Papeles de Panamá, fue el nombre que el consorcio decidió ponerle a esta gran filtración de datos, ya que todos lo presentado en ella mantenía un denominador común: una firma panameña que ayudó a crear las entidades offshore llamada Mossack Fonseca.
El mundo entero colapsó con la publicación de la base de datos. Algunas sociedades no soportaron ver a sus gobernantes dentro de la lista y tomaron medidas que llevaron a éstos últimos a dejar el cargo que desempeñaban; Otras, un poco más calmadas atacaban a través de las redes sociales al mismo tiempo que satanizaban y condenaban el uso de las entidades offshore para fines de evadir impuestos.
Algunos países, incluso, decidieron poner a Panamá de regreso en las famosas listas grises o de países considerados paraísos fiscales, mientras que la sociedad panameña defendió a capa y espada la solidez de su sistema financiero, solicitando a organismos internacionales que se quitara el nombre de su país ya que no se podía comparar que solo fuera un solo despacho de nacionalidad panameña, contra enormes cantidades de personas de múltiples nacionalidades que figuraban dentro de la inmensa base de datos.
Los días pasaron y tal parece que el boom mediático se fue calmando; sin embargo, el daño que esta filtración causó a Panamá no se podía quedar en un “ya pasó” y el gobierno decidió adoptar medidas.
¿Cómo fue que un premio nobel y un experto anticorrupción desistieron del caso?
Según la Jornada, Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía y Mark Pieth, experto anticorrupción, decidieron abandonar el comité de expertos creado tras el escándalo de los mal llamados Panamá Papers, por “diferencias de opinión sobre transparencia.”
Los expertos explicaron que “creemos que es esencial que nuestras conclusiones se hagan públicas y que se permita a los miembros del comité hablar libremente sobre éstas.” Lo anterior, ya que, a finales de julio, estos integrantes del comité recibieron una carta del gobierno panameño en la que se indicaba que únicamente el presidente de Panamá podía decidir si se publicaban estas conclusiones, lo que llevó a que los expertos presentar su renuncia el pasado viernes.
El gobierno panameño creó este comité independiente de expertos para el Centro de Servicios Financieros y Corporativos de Panamá el pasado 29 de abril. El comité estaba compuesto por siete expertos, tres extranjeros y cuatro panameños; Su objetivo, era evaluar las prácticas vigentes del centro de servicios financieros y proponer medidas para fortalecer la transparencia y la lucha contra el fraude fiscal y el blanqueo de capitales.
La primera reunión del comité fue a principios de junio en la ciudad de Nueva York. En esta reunión, había un consenso sobre la necesidad de que el gobierno de Panamá se comprometiera a publicar los resultados de este informe y el comité debía de entregar un primer informe a finales del presente año.
“El gobierno hace promesas, pero no tienen efecto, no se aplican. El gobierno de Panamá está bajo la presión del mundo de los negocios, está dando marcha atrás.” Comentó Pieth, profesor de derecho en la Universidad de Basilea.
¿Qué podemos aprender?
Sin duda, llegamos a la era en donde la transparencia es un factor que cobra una relevancia nunca antes vista. No solo las sociedades les reclaman a sus gobiernos una mayor transparencia, sino que la comunidad internacional apuntan a todos aquellos países que siguen sin unir esfuerzos en la lucha contra los delitos financieros transaccionales.
Es cierto que, no todas las sociedades offshore son creadas para fines ilícitos, existen algunas que se crean con fines completamente lícitos para reestructuras financieras, incluso para proteger a os activos de las grandes corporaciones de riesgos financieros que pueden impactar gravemente dentro de sus estados financieros; Sin embargo, creo que la molestia más grande que causo el fenómeno de los Panamá Papers, fue el que en su mayoría, los esquemas creados por la firma facilitaban la evasión fiscal de personajes altamente reconocidos en diversos países en donde las cargas tributarias con altas y sus efectos impactan directo a la clase media.
Debemos de recordar que vivimos en una era en donde ya no existen barreras. Que lo que sucede como un hecho aislado en alguna parte del mundo crece hasta volverse un fenómeno del que sus magnitudes desconocemos hasta que la bomba estalla y se revelan todos los secretos.
La transparencia, sin duda, es el camino de todas las sociedades hacia la lucha contra la corrupción. Los delitos financieros, gravemente dañan el tejido social y su efecto permea hasta los niveles más bajos, creando descontentos y grandes conflictos.
La lección es clara. No hagas cosas buenas que parecen malas. Si queremos buscar un mundo sin corrupción, debemos de comenzar fomentando la transparencia y la cultura de prevención del delito financiero. Al final, el cambio solo de dará, si lo comenzamos nosotros en lo individual de inmediato.