Obama y sus aliados expulsan a Rusia del G-8
EL ECONOMISTA, SECCIÓN VALORES
Las principales naciones industriales del mundo suspendieron ayer a Rusia indefinidamente del G-8 y advirtieron que iban a imponer fuertes sanciones económicas a Moscú si el presidente Vladimir Putin decide expandir su intervención militar en Ucrania. La decisión se produjo luego de que el presidente Obama definió su postura de unir a sus aliados en contra de lo que él ha llamado la violación de Rusia del derecho internacional debido a la anexión de Crimea a su territorio este mes. Obama y los líderes de seis naciones aliadas —Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón y Reino Unido— acordaron una reunión ayer para boicotear a Rusia de la cumbre del G-8 prevista en Sochi, Rusia, en junio. En su lugar, informaron que la convocarán en la misma fecha como el G-7, en Bruselas.
“Se está violando flagrantemente el derecho internacional y el orden que el G-7 ha ayudado a construir desde el final de la Guerra Fría, por lo que no hay ninguna razón para comprometerse con Rusia”, dijo Ben Rhodes, asesor adjunto de Seguridad Nacional de Obama. “Lo que Rusia hizo es una violación del orden internacional que se ha ido construyendo a lo largo de muchas décadas”. Sin embargo, Rusia rechazó que esta medida fuera importante. El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, en representación de Putin en la Cumbre de Seguridad Nuclear, comentó a los periodistas: “Si nuestros socios occidentales creen que el formato se ha agotado, no nos aferraremos a él”. “No creemos que sea un gran problema si no se nos convoca”, dijo Lavrov. “El G-8 es un club informal. No hay tarjeta de membresía y nadie puede ser expulsado del mismo”.