La reforma fiscal que México necesita requiere generalizar la tasa del IVA en 16 por ciento con una canasta de productos básicos exentos y reducir la tasa máxima del ISR de 30 a 25 por ciento, planteó el Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP).

El presidente electo del organismo, Carlos Cárdenas Guzmán, apuntó que dicha reforma también debe considerar la desaparición de regímenes especiales sin sustento, combatir la economía informal y eliminar el Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU).

Previo a que asuma el cargo de nuevo presidente del IMCP, en sustitución de José Luis Doñez, calculó que con estos cambios el esquema fiscal de México sería más competitivo y permitiría elevar la recaudación fiscal a 16 o 18 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

En el marco de la 89 Asamblea-Convención Nacional del IMCP, Cárdenas Guzmán sostuvo que la reforma fiscal ya es un tema de “sobrevivencia”, pues la recaudación fiscal se ha mantenido sin cambios en alrededor de 10 por ciento del PIB por décadas, y es la más baja entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

“Qué traumático, que tristeza, decirles a los legisladores que las reformas fiscales que han hecho en los últimos años no sirven para nada, por eso éste es un tema de sobrevivencia”, insistió el aún vicepresidente general del IMCP.

Consideró positivo que el Presidente electo, Enrique Peña Nieto, considere entre sus prioridades la reforma fiscal durante su primer año de gobierno, pues los mexicanos cada vez son menos tolerantes a que los políticos incumplan sus promesas, y ya no aguantan los altos niveles de pobreza y la desigualdad en el reparto de la riqueza.

Ante ello, añadió, se requiere un esquema fiscal competitivo que atraiga más inversiones al país, lo que se traduciría en mayor generación de empleos, más recaudación de impuestos y bienestar social, y con ello se evitaría cualquier riesgo social.

Para el IMCP, dijo, la reforma debe incluir la generalización de la tasa del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en 16 por ciento con una canasta que exente medicinas y productos básicos, como leche, pan y tortillas, entre otros, y mantener en 11 por ciento este impuesto en las fronteras.

Estimó que un IVA general en estos términos permitiría elevar la recaudación en 100 mil millones de pesos y con ello se compensaría la pérdida fiscal de hasta 32 mil millones de pesos por reducir la tasa máxima del Impuesto sobre la Renta (ISR), de 30 a 25 por ciento, como propone el Instituto.

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