El año que termina deja una economía que no presenta desequilibrios fiscales, financieros o de cuentas externas, que en otros países condujeron a situaciones de crisis, destacó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público(SHCP).

Al finalizar diciembre, la expectativa es que haya un déficit fiscal de 0.4% del Producto Interno Bruto (PIB), pero al considerar la inversión en Petróleos Mexicanos se eleva a 2.4% del PIB.

La proyección de la autoridad hacendaria y del Congreso es que, en 2013, exista un balance fiscal de cero, el cual se convierte en un déficit fiscal de 2%, al contabilizar la inversión de Pemex.

“El monto del déficit registrado en los últimos años en el contexto de la respuesta contracíclica a la crisis financiera global ha sido reducido, lo que permitió que la deuda pública se estabilizara en niveles moderados”, enfatizó Hacienda.

De acuerdo con el Banco de México, en 2012, el nivel de la deuda mexicana se ubica en rangos de 36.6% del PIB, por debajo de países europeos; por ejemplo, Grecia se encuentra por encima de 180% del PIB; Italia en 130% de PIB; Portugal 125%; España casi 100%; Francia 95%; Estados Unidos 96.2% y Alemania con 80% del PIB.

“En términos de deuda, la de nuestro país es menor que el promedio de sus pares con calificación similar, y considerablemente más reducida que la observada en las principales economías industriales”, expuso Hacienda. La situación estable de las finanzas públicas, se desenvuelve en medio de los problemas estructurales y de incertidumbre en el proceso de consolidación fiscal de Estados Unidos o los niveles insostenibles de deuda en países europeos, dijo Hacienda.

La dependencia, a cargo de Luis Videgaray Caso, informó que en las cuentas externas de México tienen una situación de solidez.

Agregó que el déficit de la cuenta corriente se ha ubicado en sus menores niveles en décadas y es totalmente cubierto por las entradas de inversión extranjera directa (IED).

Además de que México ha realizado un esfuerzo para ampliar los márgenes de liquidez de la economía mediante la acumulación de reservas internacionales, las cuales una semana antes de que cierre el año se ubicaron en 163 mil 650 millones de dólares.

“Esos recursos junto a la Línea de Crédito Flexible con el FMI implican un margen total superior a los 230 mil millones de dólares. Todo lo anterior se ha visto respaldado por el funcionamiento del régimen de tipo de cambio flexible como mecanismo de ajuste ante variaciones en el entorno externo”, detalló Hacienda.

Refugio de capitales

Ernesto O’Farril, presidente del índice de Confianza del Instituto Mexicano de Contadores Públicas (IMCP), aseguró que ante el entorno internacional complicado, la estabilidad de México lo convirtió en un refugio de capitales.

Agregó que nuestro país captó una importante cantidad de recursos por bonos de largo plazo que no se habían observado nunca en la historia reciente de la nación.

“Normalmente, ante un escenario de pánico, el tipo de cambio y las tasas de interés suben, pero en México las tasas bajaron, con lo cual el papel mexicano se volvió en un refugio contra el apalancamiento de otros países”, dijo el experto.

O’Farril destacó la conducción responsable de las finanzas públicas y la disciplina fiscal del país.

El IMCO sostuvo que conforme pasó el tiempo, hay un sentimiento general de mejora de los negocios derivado un mejor desempeño de la confianza de los mexicanos.

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