Aún hay tiempo para sacar reformas: Gutiérrez Candiani
El Financiero, Economía
Isabel Becerril
El sector patronal del país pidió a senadores y diputados voluntad para que los 24 días que restan del periodo de sesiones trabajen en las reformas pendientes, que se han pospuesto desde hace años o décadas.
Aseguró que hay tiempo suficiente para marcar un punto de inflexión en este estancamiento legislativo, que tiene relación directa con el inmovilismo, el deterioro y el rezago que experimenta México en muchos frentes.
Gerardo Gutiérrez Candiani, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), señaló que ya se está a la mitad de la actual Legislatura y la sociedad en su conjunto sigue a la espera de un signo que indique que la joven democracia del país es capaz de adecuarse y responder con oportunidad y visión de Estado a los retos que se enfrentan como nación.
Ya no es tiempo de hacer diagnósticos de los problemas del país y la identificación de las opciones para resolverlos; más que nuevas prescripciones, lo que hace falta son posturas claras sobre las soluciones y disposición verdadera para el acuerdo, aseveró.
Para que la ciudadanía empiece a tener confianza en sus legisladores, ya no se necesitan más foros temáticos y explicaciones del porqué no están dadas las condiciones ideales para los acuerdos que deben construirse. Lo que se quiere ver es trabajo legislativo efectivo, con transparencia y rendición de cuentas.
En su mensaje semanal «Pendientes y obligaciones legislativas», el dirigente del sindicato patronal reprochó que en el presente año no hubo intentos serios de discutir una reforma hacendaria de fondo.
Antes de que termine el actual periodo de sesiones, subrayó, los legisladores deben convocar e iniciar los trabajos por un nuevo pacto fiscal de la nación.
Pendientes
En lo que corresponde a la reforma laboral, empleadores y sindicatos han seguido trabajando estrechamente para consensuar una iniciativa integral, encontrando múltiples puntos de acuerdo, por lo que exhortó a los legisladores de los diferentes partidos a que hagan lo propio.
Asentó que en la Ley Federal del Trabajo (LFT) no hay cambios relevantes desde 1970, y existen 334 propuestas que permanecen congeladas en el Congreso.
Urge una reforma que ayude a generar empleos formales y aumente la productividad, asegurando un clima de armonía laboral, respetando los derechos de ambas partes, en un esquema de mutuo beneficio para los factores de la producción.
Dijo que también se requiere replantear y completar la reforma petrolera de 2008, que se quedó en un nivel acotado y no ha tenido un efecto significativo para detener el deterioro de esta industria.
Otro pendiente prioritario es la reforma a la banca de desarrollo, apuntó.
Las empresas seguirán en desventaja y con poco margen para crecer y generar empleos mientras no exista una mayor disposición de crédito y posibilidades reales de acceder a él. Y para apoyar a las pequeñas y medianas empresas (Pymes) es primordial avanzar en la Ley de Competencia Económica, rompiendo el paradigma de que el desarrollo del libre mercado es incompatible con un Estado fuerte, dotado de herramientas de regulación adecuadas.
La falta de acuerdos en esos temas demuestra que el sistema político de nuestro país debe ser replanteado con una reforma del Estado que consolide la transición democrática y le dé un nuevo dinamismo a la política mexicana, con mayor participación de los ciudadanos.