Los siete temas urgentes de Obama
Escrito por Jeanne Sahadi
miércoles, 21 de enero de 2009
El nuevo presidente de EU tiene varios problemas que atajar en sus primeros meses al mando; lograr la aprobación del plan de estímulo económico y mejorar el rescate financiero son algunos.
El alcance y la gravedad de los problemas que el presidente Obama deberá enfrentar sólo pueden encontrar paralelo con aquellos afrontados por Franklin D. Roosevelt en 1933.
En sus primeros 100 días, Roosevelt impulsó 15 leyes que transformaron la regulación financiera y crearon una red de seguridad social que sigue vigente al día de hoy.
Obama no conseguirá la aprobación de tantos proyectos de ley en tan poco tiempo, pero tomará decisiones e implementará cambios políticos que marcarán no sólo el resto de su administración, también las de sus sucesores.
Estos son los siete temas que Obama y su gabinete habrán de enfrentar en los primeros 100 días en la Casa Blanca:
Lograr que se apruebe e implemente el paquete de recuperación económica
Encabezando la lista está obtener la aprobación del paquete de estímulo por parte del Congreso. Para moderar las expectativas, Obama ha insistido en la idea de que la economía se deteriorará más antes de mejorar.
Sus consejeros económicos han dicho que el mayor efecto buscado es crear o salvar entre 3 y 4 millones de empleos. Eso será suficiente para evitar que la tasa de desempleo empeore para el 2010, aseguran, pero no bastará para reducir la tasa actual, ubicada en 7%.
Implementar el programa de prevención de ejecuciones hipotecarias
La semana pasada los legisladores le entregaron a Obama 350,000 millones de dólares (su primera victoria legislativa antes de asumir el cargo) al votar para permitir que el Tesoro dispusiera de la segunda mitad de los 700,000 mdd del TARP o Programa de Alivio para Activos en Problemas, especificando que parte de ese dinero sería usado para prevenir los embargos inmobiliarios.
El asesor económico de Obama, Larry Summers, ha prometido al poder legislativo que la nueva administración destinará entre 50,000 y 100,000 mdd para “atajar la crisis de embargos” y ayudar a reducir los pagos hipotecarios que ahogan a propietarios responsables pero en problemas.
Mejorar el rescate bancario
El equipo de Obama también ha prometido nuevos y mejorados esfuerzos para estabilizar el sistema financiero, exigiendo mayores requisitos a las instituciones beneficiarias del TARP y proveyendo más transparencia y supervisión de cada inversión hecha con esos fondos.
Obama contará con 250,000 ó 300,000 millones de dólares del TARP para afrontar la crisis crediticia, pero algunos piensan que esa cantidad no será suficiente para modificar el rumbo, por lo que sugieren una nueva cifra para recapitalizar los bancos: 1 billón de dólares.
Entregar una solicitud presupuestaria
Peter Orszag, designado por Obama para presidir la Oficina de Gestión y Presupuesto de la Casa Blanca, ha prometido presentar a los congresistas -a más tardar en febrero- un esbozo del presupuesto del ejercicio fiscal 2010. El esquema delineará los temas prioritarios que recibirán dinero federal durante los próximos cinco a diez años.
La nueva administración también tendrá que establecer el presupuesto de este año fiscal, pues el Congreso aún tiene que determinar ciertas asignaciones. Bajo la resolución vigente, si las dos Cámaras no resuelven el tema en estas semanas, el gobierno se quedará sin fondos la primera semana de marzo.
Definir el destino de las automotrices
Son momentos cruciales para General Motors y Chrysler, por lo que la administración Obama tendrá que decidir sobre varios temas vitales. El préstamo gubernamental por 13,400 mdd recibido por las automotrices vino con una condición: deben producir un plan de viabilidad antes del 17 de febrero, y aplicarlo antes del 31 de marzo.
El equipo de Obama tendrá que determinar si los planes presentados satisfacen las exigencias, y valorar si las compañías logran los objetivos que el gobierno les ha impuesto, entre los que están conseguir que los sindicatos acepten una concesión salarial y cambiar la forma en que las empresas financian sus programas de salud para jubilados.
Reunirse con líderes mundiales para acordar una nueva regulación
En abril se celebrará la segunda ronda de reuniones de los países del G-20 para abordar la crisis económica global. En la primera reunión los participantes acordaron trabajar para estimular la demanda económica, mejorando la vigilancia sobre las agencias calificadoras de crédito y minimizando el riesgo del mercado de los credit default swaps (seguros contra impago de deuda).
La deficiente regulación de los mercados ha sido un tema frustrante para los legisladores, pero la interconexión de los sistemas financieros mundiales dio una dolorosa lección este verano, cuando un país tras otro caía preso de la crisis crediticia tras la recesión estadounidense. Los problemas del mercado crediticio pronto detonaron crisis en todas las economías del mundo.
Convencer
Según Cary Covington, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Iowa, en sus 100 primeros días Roosevelt “cambió la psicología del país para que la gente creyera que podía enfrentar la situación.”
De igual forma, conseguir que la gente se una a sus iniciativas será una de las principales tareas de Obama. “Si su mensaje ‘Sí se puede’ (Yes, we can) persuade, entonces podría restaurar la confianza. Mucho dependerá de la forma en que presenta lo que todos estamos experimentando”, opina Covington.
Fuente: CNNExpansion.com