Disciplina fiscal impulsa a México
El Universal, Cartera
José Manuel Arteaga
El gobierno de México hizo lo correcto en la crisis financiera al no endeudarse más de lo necesario, dijo la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Para la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) fue bueno que México se haya resistido a impulsar más estímulos.
Economistas de la Universidad Panamericana consideraron que el gobierno de México actuó con responsabilidad durante la pasada crisis económica.
Aunque otros más como los del Tecnológico de Monterrey consideran que al gobierno del país le faltó agresividad para impulsar con deuda proyectos de alta rentabilidad económica.
El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) se muestra preocupado por el balance primario de la economía que es deficitario.
Gerardo Rodríguez Regordosa, titular de la Unidad de Crédito Público de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, afirmó que México tiene la fortuna de decir que los ajustes se hicieron a tiempo, y hacia adelante el panorama económica se observa de mejor manera.
“Está quedando de manifiesto lo que se argumentó durante la crisis de que la posición de México era manejable y razonable. Había que hacer los ajustes y se hicieron, en otros lados han tardado más en realizarlos y las perspectivas no son tan buenas”, dijo el funcionario.
El funcionario de Hacienda dijo que, en 2009, todo el mundo enfrentó dificultades similares a las de México, pero la diferencia es que el gobierno federal actuó con mucha oportunidad.
“Ahora otros van a tener que realizar medidas similares a las que tomó México”, dijo Rodríguez Regordosa.
En el año 2009, el Congreso de la Unión y la Secretaría de Hacienda avalaron una serie de incrementos en impuestos, con un menor endeudamiento para instrumentarse durante este año.
Le dan la razón
Sergio Garcilazo, jefe de la escuela de negocios de la Universidad Panamericana, dijo que de la crisis global, México saldrá poco a poco.
“Si se hubiera endeudado México más, ¿en qué nos hubiera beneficiado?, ¿en qué se hubieran gastado esos recursos? Yo creo que el éxito de la economía mexicana es la disciplina con que se manejan las finanzas públicas”, enfatizó el experto de la Panamericana.
El especialista aseguró que el techo de endeudamiento que se acordó en el Poder Legislativo es bueno para evitar que se desboque la economía nacional, con lo cual no se generan tasas de inflación altas y devaluaciones.
“Yo creo que México está actuando con responsabilidad en el manejo de sus finanzas públicas. Hay gente que quisiera que se repartiera dinero a manos llenas. Si volvemos a entrar al populismo exacerbado, lo único que vamos a hacer es gastarnos lo que no tenemos, la deuda crece y nos endrogamos por más años”, expuso Sergio Garcilazo.
Gabriel Pérez del Peral, director de la Facultad de Economía de la Universidad Panamericana, dijo que las autoridades mexicanas actuaron con responsabilidad fiscal en 2009.
El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), José Ángel Gurría Treviño, dijo hace unos días que México actuó en forma adecuada ante la crisis.
“En el tema presupuestal, es bueno que estemos con prudencia, incluso que hayamos resistido la tentación de hacer más estímulos”, afirmó el ex secretario de Hacienda de México.
Expuso que lo que pasó a Grecia, Dubai o Irlanda hace que las “barbas se pongan a remojar”.
El encargado del organismo internacional añadió que la experiencia y el dolor que le costó a todos los mexicanos para establecer una cultura de estabilidad y responsabilidad fiscal tiene ahora con la crisis, mucha razón.
Las deudas públicas
De acuerdo con la OCDE, los países que integran este organismo, incluido México, la deuda pública total en el año 2011 va a superar el PIB, en más de 100%.
En Japón, la deuda contra el PIB es de 200%.
Estados Unidos busca reducir su déficit fiscal a 5% al final de la administración de Barack Obama.
Alemania puso en su constitución que para el año de 2016 sus finanzas deben de estar en equilibrio fiscal.
“En México no está en la constitución, pero sí en leyes fiscales”, aseguró José Ángel Gurría Treviño.
En el caso de México, la Secretaría de Hacienda reportó que, hasta el último día de 2009, la deuda externa neta representa 4.9% del PIB, cuando en el año de 2007 equivalía a 3.8%.
En el apéndice estadístico de deuda pública 2009 del reporte de Finanzas Públicas, la Secretaría de Hacienda informó que la deuda interna representa 20% del producto interno bruto, cuando en 2007 equivalía a 15.2% del PIB.
La dependencia gubernamental dio a conocer que el saldo de la deuda externa neta del sector público federal en México sumó 91 mil 723 millones de dólares, al cierre de 2009.
Preocupación y agresividad
Jonathan Heath, presidente del comité de estudios económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo que le preocupa la posición fiscal que tiene México.
El economista agregó que en 20 años, México presentó un balance fiscal primario positivo, lo cual le permitió reducir las relaciones de deuda pública respecto al PIB, lo que contribuyó a dar una mayor solidez macroeconómica.
Añadió que según una clasificación del Banco Mundial, nuestro país pasó de una posición de sumamente endeudado a fines de la década de los 80, a medianamente endeudado en los 90 y una nación menos endeudada en esta década.
“Sin embargo, por primera vez en dos décadas, el balance primario fue deficitario en 2009 y promete volver a hacerlo ahora en 2010”, expresó Heath.
Agregó que de mantenerlo en el futuro puede resultar peligroso para el país.
Consideró que México debe hacer los esfuerzos necesarios para regresar a un superávit primario a partir de 2011.
“Ahorita estamos a tiempo, no importa tener un déficit primario de un año, como excepción, tomando en cuenta el tamaño de la crisis que enfrentamos, pero hay que corregirla y lo que no podemos hacer es mantener esa situación a través de los años”, enfatizó Heath.
José Luis de la Cruz, director del Centro de Investigación en Economía y Negocios (CIEN) del Tecnológico de Monterrey, dijo que México pudo tomar una decisión de un mayor endeudamiento, si los recursos fueran para proyectos de infraestructura bien delineados y el manejo del dinero fuera transparente.
“Si el manejo de la deuda se hubiera hecho transparente y los objetivos que fueran a financiar proyectos bien definidos y bien estudiados y donde el impacto sobre el crecimiento estuviera bien delimitado, me parece que si pudieron tomar una decisión de un mayor endeudamiento”, expuso el académico del Tecnológico de Monterrey.
Puntualizó que uno de los problemas en México es que no hay proyectos de infraestructura que cumplan con todas esas características.
Agregó que al país le faltó moverse hacia proyectos productivos bien delimitados y altamente rentables como en los rubros de energéticos, carreteros y de infraestructura portuaria.
De la Cruz expone que el gobierno de México debió de ser más agresivo, con lo cual hubiera podido echar a andar diversos proyectos en el país bien delimitados.
Pobre Grecia
Sergio Garcilazo comentó que Grecia sufre las consecuencias de incorporarse al club de los grandes.
Agregó que su economía no tiene la disciplina fiscal.
“Hay que saber manejar las finanzas públicas para estar en las grandes ligas”, aseguró el economista de la Universidad Panamericana.
De la Cruz dijo que el primer problema en Grecia fue la falta de transparencia en el manejo de los derivados financieros para en un momento poder endeudarse.
Jonathan Heath expresó que el problema de Grecia es que rebasó los topes de su deuda y déficit fiscal.
“El problema que tiene Grecia es que el ajuste no lo puede hacer contra algún tipo de política monetaria o cambiaria, porque no lo tiene, por ser miembro de la Comunidad Europea”, agregó.
Esa nación europea dejó que se deteriora su situación fiscal a lo largo de los años, consideró el economista.
¿Pudo pasarle a México?
Los economistas dijeron que México le ha mostrado al mundo una estabilidad para no vivir un episodio como el de Grecia, porque el país ha contado con los instrumentos para evitarlo.
El economista del IMEF, Jonathan Heath, dijo que afortunadamente, México tuvo a su disposición todos los instrumentos para manejar la crisis.
“Vimos que uno de los ajustes más importantes que hizo México fue el cambiario. La flexibilidad del tipo de cambio es uno de los principales puntos que nos están diferenciando de un país como Grecia”, expuso Heath.
El director del Centro de Investigación en economía y negocios (CIEN) del Tecnológico de Monterrey, José Luis de la Cruz, consideró que al tomar en cuenta los pasivos contingentes de la deuda mexicana, nuestro país ha logrado generar los suficientes recursos y el suficiente manejo político con las instituciones financieras internacionales para que no se haya generado una señal de alerta. “Cuando observamos que con pasivos contingentes, el endeudamiento mexicano supera, sin mayor problema, más de 80% en algunos casos, se contabiliza hasta 100% del PIB, y se ve que México tiene un problema de financiamiento”, dijo De la Cruz.
El investigador del Tec de Monterrey agregó que México tiene el punto favorable de que los requerimientos financieros del sector público son conocidos por los organismos internacionales.
Añadió que esa es una de las grandes diferencias con Grecia.
“En México, en lugar de utilizar los derivados financieros, lo que se utilizó para disimular o matizar los requerimientos del sector público para su gasto público en materia de inversión, han sido los esquemas Pidiregas que contabilizaban el endeudamiento; en Grecia se trató de ocultar de plano, acá si son conocidos por organismos internacionales”.
Concluyó que México no está en la situación de Grecia, pero la presión que ejercen las calificadoras es que las finanzas públicas deben resolverse.
El especialista agregó que lo que les apura es que el país cuente con los suficientes ingresos para pagar la deuda que es muy elevada cuando se contabilizan los pasivos contingentes.