El Economista. Contadores piden amnistía para impuestos diferidos. 17 de abril de 2013
La contaduría pública del país propuso un programa de borrón y cuenta nueva para el manejo de los impuestos diferidos, en el cual los grupos empresariales que se ampararon en contra de la consolidación fiscal se desistirían del juicio.
En conferencia de prensa, consideraron importante que el gobierno llegue a un acuerdo con los contribuyentes que consolidan para que, por medio de un descuento a valor presente y a tasas de mercado, se pueda liquidar en una sola exhibición el total de las diferencias temporales reconocidas en sus impuestos diferidos. “No es un perdón fiscal, es un acuerdo de negociación para tratar de limpiar estos impuestos diferidos, mediante el cual las empresas tendrán liquidez y el gobierno obtendrá una recaudación inmediata”, explicó Manuel Scapachini, asesor del Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP).
Para ello tendría que haber una renuencia de los juicios de amparo que se interpusieron cuando se hizo la última reforma a ese régimen, porque los grupos empresariales consideraron en ese momento que se violaban los derechos adquiridos y que aún no se han resuelto, expresó.
“Consideramos que un esquema específico para los diferidos en consolidación podría redituar una efectiva recaudación del gobierno federal y una simplificación en la gestión, control y posible cobro de partidas diferidas”, reiteró. Scapachino comentó que el IMCP no está de acuerdo con la propuesta de desaparecer el esquema de consolidación. “Se debe llegar a un punto intermedio, pero no eliminarlo definitivamente”. Si se considera que es un privilegio, es necesario llegar a un consenso para modificar los posibles excesos y alcanzar una neutralidad”, estimó.
Ernesto O’Farril, encargado de elaborar el Índice Mexicano de Confianza Económica del IMCP, refirió que es urgente que se haga una regulación especial para atacar el problema de las empresas de vivienda.
No hay una difusión adecuada de información oportuna sobre el uso de estos productos financieros. Se requiere una legislación que obligue a las emisoras a informar de manera inmediata si están haciendo operaciones con derivados. O’Farril afirmó que los derivados son instrumentos muy útiles cuando se aprovechan de manera adecuada, pero pueden llegar a ser una arma de destrucción masiva si se les da un mal uso. Sobre el indicador que mide el sentimiento general sobre la situación de los negocios, informó que en marzo pasado mostró cambios positivos.
Mejoró tanto la percepción actual como las expectativas sobre el futuro, aseguró. En tanto, el presidente del IMCP, Carlos Cárdenas, manifestó que una economía fuerte y competitiva, con políticas transparentes y responsables, siempre será la mejor forma de enfrentar los altibajos de un mundo globalizado.
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