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El Economista. Ausente, freno a informalidad. 11 de septiembre de 2013
Ahora fue el Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP) el que consideró que la iniciativa de reforma hacendaria presentada no es la modificación fiscal que el país requiere y que, de aprobarse, se generaría un sistema todavía menos competitivo.
Carlos Cárdenas Guzmán, presidente del organismo, destacó que las medidas propuestas tienen el objetivo claro de gravar más a los mismos contribuyentes cautivos de siempre. “A 40% de los participantes en la actividad económica que se encuentran dentro de la economía formal. No existen mayores propuestas para combatir a otro 60% que se encuentra en la informalidad, fenómeno que, por otra parte, es creciente”, dijo.
En conferencia de prensa, detalló que algunos de los puntos con los que se les vuelve a cargar la mano a ese 40% son, entre otros: la eliminación de la deducción inmediata y de la aportación de fondos de pensiones y jubilaciones, así como la desaparición del régimen de consolidación fiscal. De igual forma, el incremento de la tasa del ISR para personas físicas de 30 a 32%; el gravamen de 10% a las utilidades generadas en la Bolsa Mexicana de Valores, además del acotamiento de las deducciones personales por conceptos de gastos médicos, hospitalarios y funerarios.
El Presidente del IMCP expresó su especial preocupación en el apartado de la reforma que contempla la eliminación de la figura del dictamen fiscal. “Nuestra posición es de un total rechazo a la propuesta, no sólo por la importancia que representa para la profesión contable este servicio, sino por el perjuicio que esta reforma originará en los contribuyentes con mediana capacidad administrativa y escasa asesoría fiscal”, indicó.
Carlos Cárdenas añadió que, por otra parte, se mantiene el esfuerzo recaudatorio importante únicamente por parte de la Federación, pues los estados son sólo receptores de las participaciones. Además, expuso, preocupa que “se tiene contemplado que (la reforma) incremente la recaudación en tres puntos del PIB al final del sexenio, cuando a nuestro país le urge alcanzar niveles de 16-18%, para poder hacer frente a las obligaciones que corresponde asumir al Estado”.
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