El Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP) aseguró que la metodología de Presupuesto Base Cero para 2016 planteado por Hacienda es positivo, ya que podría generar ahorros y así asignar en el futuro un mayor presupuesto a proyectos de inversión.

El presidente de la Comisión de Análisis Económico del IMCP, Ernesto O’Farril Santoscoy, señaló que antes el presupuesto se basaba en el monto del año anterior, más la suma de la inflación, sin que existiera una valoración objetiva, por lo que este cambio es una buena noticia.

“Puedo asegurar que si el ejercicio se hace bien, los ahorros van a ser muy cuantiosos, y de esta forma se podrá asignar en el futuro un mayor presupuesto para proyectos de inversión pública’, afirmó en conferencia de prensa.

De acuerdo con el especialista, la promesa de la Secretaría de Hacienda de encontrar mecanismos y crear incentivos para la iniciativa privada entre los proyectos que deje de hacer el gobierno, puede compensar el efecto negativo del ajuste.

Sin embargo, O’Farril Santoscoy consideró necesario que las autoridades instrumenten medidas de estímulos a la inversión y al empleo, que aseguren el crecimiento de México, ya que la disciplina fiscal no es el objetivo último.

“La depreciación acelerada, la deducibilidad de las prestaciones sociales, una mayor deducibilidad para las personas físicas, un timbre fiscal para la repatriación de capitales e incentivos para la inversión financiera a largo plazo, pueden ser un buen paquete de medidas para crecer”, señaló.

En ese sentido, comentó que ante la caída en los precios del petróleo en el mundo, el ajuste de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) es un mensaje contundente de apego a la disciplina fiscal, lo que evita la ‘brasilización’ de la economía.

Y es que, explicó, ir por la puerta falsa de la deuda puede llevar al país a un círculo vicioso de reducciones en las calificaciones, mayores tasas de interés, menores flujos de inversión, más déficits fiscales, además de un menor crecimiento.

“Existen aspectos benéficos que el programa puede generar en términos de menores tasas de interés y mayor inversión, derivado de la certidumbre sobre el futuro económico, que pueden compensar de alguna forma el recorte”, expuso el directivo.

Asimismo, destacó el mérito de ajustar el gasto público en 0.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en un año electoral, así como cancelar la entrega de tres millones de televisores, como parte del apagón analógico.

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