Desde la antigüedad, tanto en arquitectura cómo en escultura y pintura, se ha buscado la forma más agradable de presentar al ojo humano las construcciones y obras de arte. Al principio, un poco por intuición, se llegó a la proporción buscada, la cual fue llamada “regla de oro” o “razón áurea”. Ejemplos de construcciones en las que fue usada ésta regla son: la prámide de Keops, la estatua “El Doríforo” de Policleto y el documento “El hombre de Vitrubio” elaborado por Leonardo da Vinci. Éste último le dio a la mencionada proporción el nombre de “Número de oro”, y lo obtuvo dividiendo la altura del hombre entre el radio de la circunferencia que aparecen en su manuscrito.
Este radio se ubica desde su ombligo hasta la punta del dedo cordial, cuando el brazo está extendido igualando la altura de su cabeza, como aparece en la figura. Numéricamente, la proporción se obtiene al dividir una línea en dos partes llamadas “a” y “b”, de tal forma que la división (o razón) de “a” sumada a “b”, dividida entre “a” sea igual a la parte “a” dividida entre la parte “b”
Expresado matemáticamente:
Utilizando álgebra y tomando en cuenta que la parte “a” es mayor que cero, resulta que la proporción, con cinco dígitos de precisión, es igual a 1.61803.
La peculiaridad de este número resulta en que también aparece en la serie de Fibonacci, (recientemente citada en libros ‘Best Sellers’ y en películas ‘Hollywoodenses’) y es muy utilizada para resolver problemas matemáticos. La serie de números que la componen es la siguiente:
A partir del 3er. número, el elemento que forma parte de la serie es la suma de los dos anteriores. Para números grandes observamos que, por ejemplo 34 + 55 = 89. Éste número, dividido entre 55 es igual a 1.61818, casi igual a la razón de oro.
Ésta progresión también aparece en la naturaleza, como en las espirales del caracol “Nautilus” y en las espirales de los girasoles. Además, se encuentra en las proporciones de la diferentes partes del hombre o de varios animales. También es el patrón de crecimiento de gemas de vegetales o de fósiles. Puede identificarse en la forma de las galaxias y en la agrupación de los átomos de algunas substancias.
El sistema integral de información empresarial “DynaWare” toma en cuenta la regla de oro, presentando muchas de las pantallas de sus módulos de operación de forma agradable a la persona que los utiliza. En la siguiente figura se muestran las dimensiones de tal forma que el largo (a + b) entre el ancho (a) de las pantallas es igual a lo que se conoce cómo la “Regla de oro”.
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-* El autor pertenece al área de Inteligencia de Negocios, y tiene experiencia laboral en el control de sistemas de las áreas ventas, finanzas y producción de empresas. Es Licenciado Físico-Matemático, egresado de la UANL, con grado de Maestría en Ciencias en Geofísica de Exploración. Ha elaborado sistemas computacionales de nómina y control escolar. Actualmente contribuye en el desarrollo de los procesos de transformación que DynaWare ofrece a sus clientes.