El Economista | Credito: Leonor Flores
En 15 años de vida, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha dado grandes pasos con la modernización de sus procesos, afirma el presidente del Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP), José Luis Doñez.
Sin embargo, propone que sea un organismo autónomo para operar al mismo nivel que el Banco de México, sin que por el momento se le separe de su responsabilidad en materia aduanera por la importancia que reviste en recaudación de impuestos.
Entrevistado por El Economista, consideró que el modelo de un organismo que se maneje con autonomía propia (como el Banco de México), que crezca la fiscalización y no sólo eso, sino con posibilidad de aportar eficiencia y estar a niveles de otros países en cuanto a la modernización e independencia, es recomendable para el SAT.
Para el caso de la responsabilidad de las aduanas, el Presidente del IMCP estimó que no debería quedar fuera de un organismo recaudador autónomo porque es parte de la recaudación del país. “Tener un SAT para los contribuyentes y otro para las aduanas no se podría hacer.
“Debería ser un sólo SAT, pero creo que pueden ser más eficientes las diferentes áreas, como la de Comercio Exterior, Grandes Contribuyentes y la fiscalización estratégica como el outsourcing”, opinó.
DEL PAPEL AL INTERNET
José Luis Doñez refirió que, en su experiencia en la contaduría pública por más de 30 años, le ha tocado vivir una evolución muy trascendental del brazo fiscal de la Secretaría de Hacienda porque “pasamos de hacer todas las cosas manuales a sistemas electrónicos”.
“Creo que el SAT ha tenido un desarrollo y una fiscalización muy moderna en procesos muy específicos. Porque antes todo era en papel. Las oficinas de Hacienda eran más receptoras de papel y era notoria la gran cantidad de archivos. Y hoy estamos en una época en que ya nuestros pagos mensuales, declaraciones, se hacen en medios electrónicos. Se ahorra mucho tiempo y estamos en una posición ventajosa y competitiva para cumplir con las obligaciones tributarias que tiene el contribuyente”.
Y los resultados se han notado en el número de contribuyentes, aseguró. Eso no se podía dar sin sistemas modernos de identificación de datos de millones de personas que integran el padrón.
“No digo que esto no se daba en el pasado. Pero, ahora, hay una mayor facilidad de cumplimiento y de que los que están en la informalidad se integren”, aclara.
Pero puede tener todavía muchas mejoras en materia de recaudación por medio de la detección de auditorías, lavado de dinero y más simplificación de los trámites, como lo están haciendo el IMSS y el Infonavit.