El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha venido madurando de manera exitosa en estos últimos años, sobre todo gracias a las implementaciones tecnológicas, precisaron analistas. Herbert Bettinger, quien fue coordinador de la creación del SAT, afirmó que en aquel entonces, cuando la Subsecretaría de Ingresos era la encargada de los ingresos tributarios, era necesario separar la política fiscal de la administración tributaria y, tras analizar varios sistemas tributarios de administración alrededor del mundo, el 1 de julio de 1997 nació el SAT.

“Fue un proyecto maravilloso y encantador (…) Fue necesario tecnificarlo; fue un paso importante poder eliminar las máquinas de escribir y meter todos los sistemas electrónicos, hasta llegar hoy en día a lo que conocemos como buzón tributario, una aportación que ha bajado los costos y ha permitido una presencia constante de la autoridad en los ingresos y operaciones de los contribuyentes”, aseveró Bettinger.

En línea con lo anterior, Carlos Cárdenas, fiscalista, expresidente del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, comentó que uno de los mayores logros es “meter al SAT y a los contribuyentes en el mundo electrónico”.

Además, añadió que también se ha avanzado en el proceso de revisión de auditorías, pues actualmente el fisco tiene un sistema que a través de parámetros y la ayuda tecnológica se pueden identificar a los contribuyentes con más riesgos y aplicarles a ellos las auditorías.

Recaudación se logra pese a falta de cultura fiscal

A decir de Bettinger, el SAT se ha fortalecido año tras año, y los jefes que han estado a cargo del fisco han dejado su experiencia para hacerlo crecer aún más. “Los jefes del SAT y la Secretaría de Hacienda siempre han estado atentos para estar a la vanguardia y tecnificar al SAT. hoy en día, este organismo es una de las agencias tributarias más importantes en el mundo”, precisó.

Agregó que, pese a la falta de cultura fiscal de pago que existe en México, el SAT ha logrado cumplir con su trabajo y muestra de ello son las recaudaciones récord que ha registrado en los últimos años, cifras que son resultado de la implementación de nuevas tecnologías.

Aunado a lo anterior, Carlos Cárdenas refirió que el factor que hace que la recaudación aumente y se cumpla es por la automatización que ha tenido el órgano recaudador.

Por otra parte, respecto a la meta de recaudación de 2.7 billones de pesos que se establece en la Ley de Ingresos de la Federación 2017, Herbert Bettinger indicó que es una meta “totalmente realista”, dado que el SAT tiene la organización, la estructura y la tecnificación para lograrlo.

Informalidad, el reto

A pesar de las altas cifras de recaudación, Carlos Cárdenas comentó que éstas debían analizarse en proporción del Producto Interno Bruto, algo que nos deja por debajo de la media de los países de América Latina y de la OCDE.

Ante lo anterior, precisa que lo que debe hacer el SAT es combatir la informalidad, ya que actualmente 60% de los participantes de la economía están dentro de este sector y es el mayor problema al que se enfrenta el fisco.

“México nunca va a poder alcanzar el nivel de recaudación que debería tener mientras permita, o siga permitiendo, tener ese porcentaje de economía informal. En todos los países puede haber economía informal, pero no de ese tamaño”, indicó.

Por su parte, Bettinger consideró que aún se puede mejorar y buscar mejores prácticas. “Nosotros lo que hicimos —hace 20 años— fue crear un modelo que aguanta todo, pero que se tiene que actualizar, implementarlo y llevarlo a las nuevas técnicas de la tecnología de la información a través de sistemas novedosos”, acotó.

Asimismo, precisó que el SAT debe redimensionar sus administraciones locales y, posiblemente, reubicar algunas y crear otras para tener siempre una presencia adecuada, un servicio inteligente y oportuno al contribuyente.

Recaudación ha crecido 5.5 pp del PIB en 20 años del SAT

El Servicio de Administración Tributaria (SAT) cumple 20 años en julio y, de acuerdo con información del organismo, entre los principales logros de los últimos años está el incremento en la recaudación.

En los últimos cuatro años, “la recaudación aumentó 5.5 puntos porcentuales (pp) del Producto Interno Bruto (PIB), pasando de 8.4% en el 2012 a 13.9% en el 2016”, precisa.

En 1997, su primer año de funciones, el SAT logró recaudar 312,115.33 millones de pesos. En contraste, el año pasado se obtuvieron ingresos tributarios de 2.71 billones de pesos, superando la meta de la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) para el 2016, que era de 2.4 billones.

El incremento de la recaudación de 1997 al 2016 significa un crecimiento “en la rentabilidad de la recaudación”, pues actualmente sólo se invierten 53 centavos para cobrar 100 pesos, cuando antes se tenía que invertir más de 1 peso.

Para este año, la meta de recaudación establecida en la LIF 2017 es de 2.73 billones de pesos; al primer cuatrimestre, se estimaban ingresos por el pago de impuestos de 963,236.4 millones de pesos; sin embargo, la cifra fue rebasada y llegó a 1.01 billones de pesos, es decir, 5.8% más de lo esperado.

Por otro lado, “a lo largo de 20 años de vida de esta institución se ha desarrollado una serie de mecanismos para facilitar el cumplimiento de las obligaciones fiscales”, asevera el SAT, destacando el sitio de Internet en el cual los contribuyentes pueden inscribirse al RFC, comunicarse con la autoridad a través del buzón tributario, realizar sus declaraciones fiscales, entre otras cosas.

El uso de herramientas tecnológicas también ha ayudado a que el padrón de contribuyentes se haya incrementado. A mayo de este año, se tiene registro de un total de 60.9 millones de pagadores de impuestos que están en activo; en 1997, el padrón estaba compuesto por 5.7 millones.

Por su parte, la factura electrónica es de las cosas más significativas de la administración tributaria. Del 2005 a la fecha se han emitido 29,000 millones y actualmente se emiten alrededor de 200 facturas por segundo.

“La implementación de la factura electrónica es el factor de simplificación y control más significativo en la administración tributaria actual, además de ser un mecanismo que brinda certeza a las operaciones”, asevera el SAT.

Respecto al comercio exterior, se ha logrado liberar proyectos que facilitan la entrada y la salida de mercancías del país, con controles más eficientes gracias al programa Hacia la Aduana del Siglo 21, con la cual se eliminaron los semáforos fiscales en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, además de eliminar el pago en efectivo en las aduanas.

Por último, el SAT firmó el acuerdo BEPS para evitar la doble tributación y mantener el intercambio de información con otros países, a fin de combatir las prácticas de evasión fiscal.

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