IMCP

Campaña Nacional de la Contaduría Pública

Fundado en 1923 y conformado actualmente de 60 colegios de Contadores

IMCP_Tienda Conoce a tu Colegio y Guía de Operación

Servicios

  • Imprimir
  • youtube

¿Cuál es la cifra adecuada para analizar el estado de la economía? Podemos decir que el ritmo respecto del año pasado sigue siendo positivo, pero que la tendencia a corto plazo no es favorable dada la inclinación en relación con el trimestre anterior.

El tono general, sin embargo, más allá de que en el margen la economía crezca o no, es el bajo dinamismo de la actividad. Esto es especialmente cierto en el sector secundario (manufactura, construcción, minería, energía), que decreció 2.1 por ciento respecto del año pasado.

Además, está la ambigua situación del sector servicios que representa el mayor peso dentro de la economía: logró apuntalarse 1.0 por ciento en contraste con el año pasado, pero cayó 0.2 por ciento respecto del trimestre anterior.

Y, por último, y como lo hemos notado aquí en este espacio, el sorprendente dinamismo del sector primario, que crece en ambas comparaciones y brinca 5.6 por ciento con respecto al año anterior.

Pero la dinámica de los datos muestra una cifra que debe de preocuparnos. Aunque las cifras son oportunas y dado el pequeño margen de variación, no sería raro que en las revisiones finales de la estadística se den la vuelta, pues todo parece indicar que marzo fue un mes muy severo para la economía.

Las cifras del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), que es muy similar a un PIB mensual, habían mostrado en febrero un incremento de 1.1 por ciento respecto del año anterior, y un avance de 0.3% respecto de enero, con crecimiento uniforme en los tres sectores en la base intermensual.

El IGAE de enero había resultado también sólido, de 0.2 por ciento sobre una base intermensual, y de 1.2 por ciento en la comparación interanual. Las cifras eran alentadoras luego de que en diciembre casi todos los datos habían mostrado debilidad aguda y hacían temer un inicio de año muy frágil. Pero no ocurrió.

Por el contrario, enero y febrero fueron sensiblemente mejores a lo que se esperaba y parecía que la economía había doblado la esquina con paso sólido.

Pero el dato oportuno del PIB del primer trimestre, que muestra un estancamiento general, nos deja dos opciones: o las cifras oportunas serán revisadas al alza y acabaremos viendo un ligero crecimiento (posible pero poco probable); o es la señal de que marzo fue un mes sorprendentemente flaco para la economía.

Algunos datos apoyan la especie de un mes de marzo enclenque. En particular, las importaciones de bienes intermedios, que dominan el monto total de importaciones, y que en una economía reexportadora como la mexicana son un útil indicador de la actividad productiva futura de corto plazo. En marzo apenas crecieron 0.1 por ciento, luego de avanzar 5.2 por ciento en febrero y crecer 7.8 por ciento en enero.

Las cifras parecen sugerir un parón súbito de la economía en marzo, quizá ligada a los primeros atorones del flujo de importaciones en la frontera. Las importaciones de bienes de consumo cayeron 0.5 por ciento en marzo y las de bienes de capital quedaron sin movimiento respecto del año anterior.

Las cifras son aún más preocupantes si consideramos que marzo de este año tuvo más días hábiles que el mismo mes del año anterior por el efecto de la Semana Santa, y es justo lo que marca la diferencia entre las cifras brutas y las ajustadas por estacionalidad.

La dinámica de corto plazo del sector automotriz concuerda con una desaceleración en el mes de marzo. Un desenvolvimiento exiguo se evidencia con la disminución de las ventas en el último periodo. Sin embargo, la comparación parte de una base falaz, por la disparidad de días hábiles en la comparativa con respecto a abril del año pasado.

Debido a que dicho sector absorbe un porcentaje relevante de las importaciones de bienes intermedios, éste genera un efecto de arrastre. Al analizar el comportamiento del sector automotriz y las importaciones, podemos apuntar a una posible aminoración en el ensamblaje para el periodo venidero, pese a que los datos sobre producción y exportación se encuentran en terreno positivo.

Liga Excélsior clic aquí